| Día 1 |
Vuelo a Cali. A la llegada, recepción en el aeropuerto y traslado al hotel. |
| Día 2 |
Cali. Por la mañana realizamos visita guiada a la ciudad, la Plazoleta Jairo Varela, el Boulevard del Río con la iglesia gótica La Ermita y el Teatro Municipal, el Parque de los Gatos, el barrio de San Antonio, la iglesia de La Merced, el Cerro de Cristo Rey.
Por la tarde visitamos el carismático Mulato Cabaret, donde el arte del cabaret y la pasión de la salsa se fusionan en un espectáculo inolvidable. |
| Día 3 |
Cali – Salento – Eje Cafetero. Tras el desayuno, salimos por carretera hacia Salento, realizando paradas durante el trayecto. Llegada y alojamiento. |
| Día 4 |
Eje Cafetero. Tras el desayuno, realizamos un paseo bajo las palmas de cera más altas del planeta en el Valle del Cocora, observando el espectáculo desde los misteriosos bosques de niebla. Durante la jornada, la arquitectura de los pueblos con encanto es protagonista por su autenticidad y singularidad.
Visitamos Salento, para conocer de cerca su arquitectura, las formas y vivos colores de las viviendas en la calle real, hasta llegar al mirador del pueblo. Tras degustar un almuerzo de cocina tradicional, nos dirigimos al municipio de Finlandia, donde recorremos las principales calles del pueblo observando las formas y colores de las construcciones elaboradas con bahareque, visitando miradores naturales y el centro de interpretación “Del bejuco al canasto” para conocer el arte elaborado con fibras vegetales, los cuales dan origen a la tradicional cestería. |
| Día 5 |
Eje Cafetero – Manizales: el Nido del Cóndor. Nos dirigimos hacia la población de Manizales, punto de partida para acceder a nuestro singular alojamiento ubicado en una reserva natural. Podemos elegir entre:
Senderismo, hasta el Nido del Cóndor en un recorrido de 1h aproximadamente.
Cabalgando, una experiencia tradicional y tranquila a través del paisaje andino, o bien
Teleférico, una opción cómoda que nos brinda impresionantes vistas panorámicas.
Este hotel de montaña es un lugar único, completamente inmerso en la naturaleza, ofrece una experiencia de conexión profunda con el entorno sin renunciar al confort. Ideal para desconectar y deleitarse con el espectáculo del vuelo de los cóndores. |
| Día 6 |
Manizales – Jericó – Santa Fe de Antioquía. Nos dirigimos a Jerícó, un auténtico bastión de la cultura antiqueña. Con numerosos edificios históricos, la población se concentra alrededor de una de las plazas más hermosas de la región, encabezada por una enorme iglesia de ladrillo. Tras la visita, continuamos hacia Santa Fe, en un trayecto a través de inmaculadas reservas naturales, miradores panorámicos y encantadoras fincas cafeteras. El recorrido es también una transición entre el clima fresco de Jericó y el ambiente tropical y vibrante que rodea Santa Fe. |
| Día 7 |
Santa Fe de Antioquía: la Ciudad Madre. Después del desayuno, nos adentramos en la encantadora ciudad colonial de Santa Fe de Antioquia. Con sus hermosos portones y calles empedradas, esta ciudad nos invita a sumergirnos en su rica historia y patrimonio cultural. Visitamos el Parque Principal, la Plaza de la Chinca, el Museo Juan del Corral y la histórica Iglesia de Santa Bárbara. También el Puente Colgante de Occidente, una obra maestra de ingeniería del siglo XIX que se erige sobre el imponente río Cauca. Santa Fe de Antioquia cautiva con su encanto colonial y su vibrante legado histórico. |
| Día 8 |
Santa Fe de Antioquía – Medellin. Traslado a Medellín, la Ciudad de la Eterna Primavera. Llegada y traslado al hotel. Por la tarde realizamos visita guiada a los enclaves más destacados de la ciudad. |
| Día 9 |
Medellín – Parque Nacional Utría. Traslado al aeropuerto y vuelo a Nuquí, en la costa pacífica colombiana. Pocos lugares reúnen tanto misterio y belleza como la Ensenada de Utría. Ubicada entre el Océano y la selva tropical, sus cálidas aguas son el lugar idóneo para cobijar un gran número de especies marinas migratorias como tortugas, aves y especialmente, ballenas. |
| Día 10 |
Parque Nacional Utría: río Jurubidá y Comunidad Emberá. Salimos en lancha hacia el río Jurubidá, donde iniciamos la navegación a través de impresionantes manglares y una exuberante selva, hábitat de sorprendentes aves coloridas. Tras una hora de recorrido, llegamos a la comunidad Emberá. Recibidos en la maloca principal, somos testigos de la riqueza de este grupo indígena; sus símbolos sagrados y tradiciones ancestrales. |